Nadie posee a Dios. Dios es energía. Ningún sistema de creencias, ninguna religión puede reclamar la propiedad del Ser Supremo, porque esa energía no es para mantenerla, apropiarla, controlarla ni capturarla. Esa energía simplemente es. Por siempre. A veces al Alma Suprema se la llama Padre de todas las almas. Esto significa que todos están alineados a esta Fuente y pueden vincularse a ella. Usted es libre de tener una conexión con el Supremo cuando lo desee. No hay reglas fijas para el diálogo, solo un corazón abierto, dispuesto y honesto.